miércoles, 30 de diciembre de 2009

Interacciones entre tamoxifeno y antidepresivos SSRI

Hasta el momento, tenemos:
1. un mecanismo propuesto y estudiado: tanto el tamoxifeno (TAM) como varios SSRI (especialmente fluoxetina, paroxetina y sertralina) utilizan el sistema enzimático CYP 2D6, necesario para la formación de metabolitos más activos que el tamoxifeno (uno de ellos, denominado endoxifeno; otros: demetil-TAM e hidroxi-TAM). Los SSRI nombrados son fuertes inhibidores de 2D6. (Stearns et al. JNCI 2003 Dec 3;95(23):1758-64).
2. un ensayo mecanístico que muestra que - al contrario de lo que se propala - la venlafaxina tiene una interacción minúscula con TAM, probablemente irrelevante en la clínica (bien! se puede combatir las tuforadas!) (Yin et al. JNCI 2005 Jan 5;97(1):30-9).
3. el estudio presentado en ASCO 2009 es un trabajo observacional, sobre 1300 mujeres que iniciaron consumo de TAM (aparentemente, en forma adyuvante) y estaban registradas en una base de datos de consumo farmacéutico. Este trabajo observó una tasa inferior de eficacia terapéutica (riesgo de recaída del cáncer mamario) si se consume simultáneamente TAM + SSRI por muchos meses, respecto de TAM solo. (Aubert RE. J Clin Oncol 27:18s, 2009 (suppl; abstr CRA508) ). Sin duda, el trabajo no pudo controlar y evitar numerosos sesgos posibles. No prueba causalidad, sino que sólo señala una posible asociación, y requiere un estudio más directo.
Nótese que no todos los estudios de observación notaron esta interacción (por ej, por la negativa: Galicchio et al. Cancer Letters 2004 Jul 28;211(1):57-67 y Ahern et al. JNCI Cancer Epidemiol Biomarkers Prev. 2009 Sep;18(9):2562-4).

Qué otros factores (no considerados en los estudios precitados) podrían jugar un rol relevante? Para comenzar, los polimorfismos genéticos de CYP 2D6 podrían determinar diferente respuesta a TAM (Schroth et al. JAMA 2009 Oct 7;302(13):1429-36). Hace falta un estudio a fondo, incluyendo ambos elementos (interacciones y polimorfismos).

Moralejas:
a. no empastillar ni empastillarse con SSRI - ni con nada innecesario
b. tomarlo con calma: al menos citalopram y venlafaxina, no interactúan en forma relevante con TAM.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Futilidad terapéutica: una mirada crítica

Los médicos intentamos decidir, a priori, si una terapéutica tiene razonable probabilidad de beneficiar a nuestro paciente, brindando un balance favorable al ponderar riesgos versus beneficios. Si la expectativa de beneficio es mínima o nula, y especialmente si requiere enfrentar sufrimientos o riesgos fuera de proporción con el resultado esperable, rechazamos tal opción terapéutica, declarándola fútil.
El Diccionario de la Real Academia Española define fútil como "de poco aprecio o importancia".
Un reciente artículo de acceso gratuito, publicado en British Medical Journal (BMJ) analiza el significado de "futilidad" en la terapia médica, con una mirada crítica:
El autor comienza recordándonos el origen latino de la palabra fútil: futilis, que pierde líquido, que deja escapar el agua (refiriéndose a un recipiente). Se trata de un recipiente que no cumple con su función específica. La reflexión del autor nos recuerda el fuerte componente subjetivo de la expresión, la "pendiente resbalosa" por la que caminamos al utilizar este término, y sobre todo, que la futilidad depende mucho del objetivo fijado. Señala también tres tipos de futilidad:
la que denomina "fisiológica", cuando la intervención no puede lograr el objetivo. Más realista es la futilidad que el autor llama "cuantitativa", en la cual se considera altamente improbable que la intervención propuesta logre el objetivo (terapéutico), y finalmente la que apunta como "cualitativa", según la cual la intervención - si fuera exitosa - llevaría a tan desagradable desenlace que se considera mejor no intentarla.
Hemos escuchado estas expresiones, bajo diferentes circunstancias y escenarios. Remito a los lectores a comentarios sobre las leyes de "muerte digna" de las provincias de Río Negro y Neuquén.
Deberíamos preguntarnos: ¿qué tan precisos somos al estimar la futilidad de diversas intervenciones? ¿Somos conscientes de las subjetividades involucradas?
Saludos cordiales,
Dr. Pedro Politi
PD: agradezco a la Dra. María Viniegra por haberme recomendado la lectura del número de BMJ en que hallé este artículo. Los beneficios de la "lectura lateral".

jueves, 17 de diciembre de 2009

Mantenimiento con erlotinib en cáncer de pulmón?

El Comité Asesor sobre Drogas Oncológicas convocado por la FDA resolvió ayer rechazar la solicitud de aprobación de una nueva indicación de erlotinib, presentada por Genentech/Roche/OSI. Tal solicitud (acompañada de los resultados de un ensayo clínico aleatorizado comentado previamente en este blog) buscaba incorporar una nueva indicación para el erlotinib, en la terapia de mantenimiento del cáncer de pulmón a células no-pequeñas (en enfermedad avanzada o metastásica), luego de respuesta objetiva o enfermedad estable post-quimioterapia de primera línea.

Los considerandos del Comité, que votó 12-1 para rechazar la nueva indicación solicitada, se basaron en que el incremento en supervivencia con este abordaje era "modesto" (un mes) y en que no había pruebas que avalaran superioridad de este uso de mantenimiento respecto de la pauta actualmente aprobada por la FDA, es decir, luego de progresión post-quimioterapia.

En otras palabras, se mantiene el rol de erlotinib como una opción aprobada para segunda linea en cáncer pulmonar avanzado, ante la progresión de enfermedad.

La FDA no está obligada a seguir la recomendación del Comité, pero habitualmente lo hace.

Cordiales saludos,
Dr. Pedro Politi

domingo, 13 de diciembre de 2009

En la Argentina, el tabaco sigue matando

A pesar de avances parciales tales como la prohibición de fumar en espacios públicos y semipúblicos cerrados - implementados por algunas ciudades - el tabaco sigue matando en la Argentina.

Y según estadísticas recientes, se venden más atados (un 13% entre 2005 y 2008, según Clarín), ya que su precio se halla "retrasado" y hay controles gubernamentales que dificultan o impiden aumentar los precios (según las tabacaleras):
http://www.clarin.com/diario/2009/12/13/sociedad/s-02060848.htm

Esta situación no es nueva, lamentablemente. El estudio epidemiológico CARMELA, sobre 11.500 individuos de ambos sexos, entre 25 y 64 años de edad, en siete ciudades latinoamericanas, mostró que las ciudades de Buenos Aires, Argentina y Santiago, Chile, ostentan el triste privilegio de liderar en cuanto a tasa de tabaquismo en mujeres (Schargrodsky H et al. Amer J Med 2008; 121: 58). Este "liderazgo" ubica a ambas ciudades entre las de más alta tasa mundial de tabaquismo en mujeres.

Entretanto, el ministerio de...¿salud? publicó normativas y planes para cesación de tabaquismo, pero... ¡que deberán ser afrontados por el bolsillo de los individuos! (para jolgorio de las empresas tabacaleras). Un claro ejemplo de cómo "ser funcional al sistema". ¿No le parece, ministro? (y la anterior, y el anterior...).

Atentamente,
Dr. Pedro Politi

miércoles, 2 de diciembre de 2009

Prevención primaria en la consulta diaria

¿Qué sería mejor: poner en marcha un Consultorio de Screening de cáncer colorrectal, o bien sumar fuerzas con otros servicios y áreas para integrar las medidas de prevención de diverso tipo? Esta pregunta surgió en unas recientes Jornadas hospitalarias.

Permítanme exponer el caso a favor de tender puentes, establecer alianzas estratégicas con otras especialidades y áreas de la Salud, de modo de alcanzar más poder de "lobby" y obtener los recursos - y el acceso a la decisión - necesarios para difundir los conceptos fundamentales de Prevención Primaria.

Si reconocemos que muchas enfermedades (incluidas las neoplásicas) comparten factores de riesgo identificables en la anamnesis y examen físico (obesidad, sedentarismo, dieta rica en grasas saturadas, tabaco, alcohol, e historia familiar de cáncer, por nombrar algunas de las más evidentes), comprenderemos que hay "ramilletes" (clusters) de patologías que se asocian con similares factores de riesgo. Así, con una sola (o con una serie) de medidas de estilo de vida, podríamos reducir el riesgo de diabetes tipo 2, osteoporosis, cáncer colorrectal y de endometrio, y enfermedad cardiovascular y cerebrovascular. Esa medida abarcativa de prevención primaria es la actividad física regular.

Del mismo modo, con medidas para alentar la cesación del tabaco, colectaríamos beneficios (en años) en términos de riesgo cardiovascular, cerebrovascular, EPOC y cáncer de cabeza y cuello, pulmón, riñón, páncreas y vejiga.

Es importante ampliar la mirada y formar ya esas alianzas; buscar acceso a sitios y actividades de alta visibilidad (deportes, eventos) para enviar el mensaje. Por ejempo: "la actividad física habitual reduce el riesgo de cáncer colorrectal y de endometrio, así como el riesgo de enfermedades circulatorias y diabetes". Con una sola iniciativa, apoyada por grupos profesionales que se dedican a patologías diversas (pero interrelacionadas) podríamos poner a la vista de la sociedad, medidas costo-efectivas, accesibles, para mejorar la calidad de vida y hacer prevención primaria.

Otro punto, más referido al título: necesitamos componer recomendaciones sobre "qué hacer, qué recomendar" en términos de estilo de vida, prevención primaria y también en lo referente a screening. Muchos colegas están confundidos, o bien conocen lo que habría que hacer ante un familiar de primer grado de un paciente con cáncer colorrectal: recomendarle pautas de screening según su nivel de riesgo y según normas validadas por evidencia. Pero... "no hay tiempo". Basta con eso: redactemos volantes para el paciente, y un librito de bolsillo para el médico: según edad, qué debo pedir al paciente asintomático que consulta "por otra cosa" o que es familiar directo de un paciente con diagnóstico de cáncer.

De este modo, seguiremos el ejemplo de la Pediatría, que tiene bien en claro que cada contacto con el paciente y su familia es una "oportunidad" para avanzar en Promoción y Prevención Primaria, y que no debe ser desperdiciada.

Qué les parece?

Saludos cordiales,
Pedro Politi

domingo, 29 de noviembre de 2009

Nuevas recomendaciones sobre mamografía de screening

La "Task Force" (US Preventive Services Task Force), un grupo independiente de expertos de los EEUU, publicó el 17 de noviembre sus recomendaciones sobre el tema, como resultado de un exhaustivo análisis de la literatura médica.
Justamente la semana previa tuvo lugar un debate sobre este tema, en el Congreso de SAMIG, una Sociedad de Medicina Interna independiente de Big (and small) Pharma.

El tema viene arrastrándose desde los años 80: recuerdo que en 1989, el director del NCI de los EEUU tuvo que ceder a la presión del Congreso USA para recomendar bajar la edad de inicio del screening a los 40 (hasta entonces, la recomendación oficial era a partir de los 50).

El resumen es así: debemos ir con la verdad. La mamografía a los 40 años de edad tiene mucho menos rendimiento diagnóstico: la prevalencia del cáncer mamario es menor, la mama es mucho más densa, y ... "andá a buscar las microcalcificaciones, en medio de una tormenta blanca de parénquima mamario" (Politi dixit). Entonces, hay más dudas, más estudios extra, más biopsias, más sufrimiento, más confusión. En contraste, a medida que se envejece, el tejido mamario muestra mayor predominio de grasa respecto del parénquima, y provee un fondo radiolúcido sobre el que es más fácil detectar lesiones.

La verdad, o la mejor aproximación que podemos tener a la fecha, a la luz de la evidencia disponible hoy: la herramienta es bastante limitada. El NNS (number needed to screen) es de 1700 mujeres por 14 años, para salvar una vida - si comenzamos a los 40 años. Más o menos, como dar estatinas a un varón en prevención primaria. La sociedad está pagando esos bajos rendimientos, pero debe saber que son bajos. Así, con 14 años, la ventaja de las "chicas de 40" se "colecta" a partir de los 50 (estadísticamente hablando).

La Task Force solamente re-revisó la evidencia disponible: ensayos de calidad diversa que van variando sus resultados, lógicamente, con el seguimiento, con el devenir del tiempo. Sus recomendaciones sacudieron al establishment: en mujeres de riesgo estándar (es crítico identificar en qué grupo de riesgo se halla la mujer, en base a la anamnesis, y potencialmente, con ayuda de algoritmos - validados para la población estadounidense, no para la nuestra), iniciar con mamografía a los 50, repitiéndola cada 1-2 años (otro motivo de escándalo). Pero todo se basa en el riguroso análisis de la evidencia publicada.

Naturalmente, en pacientes de riesgo elevado (sea por historia familiar, por presencia de hiperplasia atípica o carcinoma in situ en una biopsia previa, o por menarca precoz o menopausia tardía, o por radioterapia torácica por enfermedad de Hodgkin, o por mutación genética sospechada o conocida, entre otros factores), se pondrán en marcha medidas adecuadas, individualmente seleccionadas, de consenso con la paciente, en conocimiento de los riesgos, inquietudes y beneficios acarreados por el screening (rastreo sistemático).

¿Qué explicar a las pacientes de 40-49 años, preocupadas por el riesgo de contraer cáncer mamario? Ni más ni menos que "la verdad": compleja, esquiva, con áreas borrosas. Que la mamografía es menos útil como herramienta diagnóstica en mujeres con mamas densas, y eso representa más falsas alarmas, re-tests, y biopsias. Que hay medidas de estilo de vida que podrían reducir el riesgo (hay datos en prevención secundaria, que sugieren que una combinación de ejercicio aeróbico por 5-6 días semanales, más dieta con alta fibra, vegetales frescos y verduras, e hipograsa, reduce la tasa de recaída del cáncer mamario en 50%). Si esto fuese una píldora, sería... "el avance más importante en 50 años". Pero no tiene prensa, ni incentivos, ni atractivo de marketing.
En casos bien definidos, es posible ofrecer un fármaco (raloxifeno o tamoxifeno) para reducir a la mitad el riesgo de cáncer mamario - en mujeres de riesgo elevado. Pero no hay datos sobre el balance riesgo-beneficio luego de 5 años de uso, y hay que balancear los riesgos (tromboembólicos en el rango de 1-2% anual, y carcinogénesis endometrial en el rango de 2 por mil anual) frente a una reducción de 50% en cáncer de mama. No es para abordar ligeramente, sino en una consulta profesional. (Nota: esto NO ES una recomendación. Si Ud que lee es una paciente, consulte a su médico).

"Sólo la verdad nos hará libres". La mamografía es una herramienta imperfecta. Es lo que hay. La ecografía es aún peor - en líneas generales - porque sólo permite discriminar entre lesiones quísticas y sólidas.
Hay disponible RMN de la mama ("es otro precio"), pero sólo resulta complementaria (mala para microcalcificaciones, buena para tejido blando, muy sensible, poco específica). Un problema más: si sólo la RMN visualiza la lesión (y no la mamografía), entonces habrá que biopsiar en un resonador, con instrumental especial y con personal especialmente entrenado.

La American Cancer Society ha recomendado recientemente añadir la RMN mamaria a las estrategias de screening en mujeres de riesgo elevado o con alta densidad mamaria. Esta recomendación NO ha sido compartida ni por la "Task Force" ni por el grupo canadiense de medicina preventiva. Siempre puede uno plantearse: ¿el problema es con la evidencia disponible o con su interpretación?

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

Muerte digna, vida digna

Por qué tenemos leyes de "muerte digna" y no las tenemos para garantizar una vida digna?

Por qué se ha legislado sobre el derecho para rehusar tratamientos (o interrumpirlos), mientras que no se ha legislado simultáneamente para garantizar la accesibilidad a los tratamientos médicamente necesarios, y a las condiciones de vida que promueven la Salud?

Por qué se anuncian iniciativas para acordar "descuentos" de 30% en medicamentos que tienen entre 2.000 y 20.000% de margen de ganancia - algunos de los cuales bien podrían integrar la categoría de "drogas puaj"?

Modelo sanitario o modelo de mercado?

"La Salud es una decisión política" dijo el Dr. Ramón Carrillo.

Saludos,
Pedro Politi

martes, 10 de noviembre de 2009

Leyes de "muerte digna" en la Argentina

Leyes sobre "muerte digna" en Río Negro y Neuquén: una mirada médica.

Recientemente se reglamentó esta ley en Río Negro (fue sancionada en el 2007), en tanto que la ley neuquina es de fines del 2008. Varios expertos han opinado sobre el tema, incluyendo posiciones importantes de los Dres. Francisco Maglio y Carlos Gherardi, disponibles por búsqueda en Google*

La ley de Río Negro señala que "toda persona que padezca una enfermedad irreversible en estado terminal tiene derecho a manifestar su rechazo a los procedimientos quirúrgicos, de hidratación y alimentación y de reanimación artificial cuando éstos sean desproporcionados a las perspectivas de mejoría
y produzcan dolor y sufrimiento".

La ley neuquina expresa "Considerando que al respeto por la vida corresponde el respeto por la muerte, los pacientes tienen derecho a decidir
en forma previa, libre y fehaciente, la voluntad de no prolongar artificialmente su vida a través de medios extraordinarios o desproporcionados, y a que se reduzcan progresivamente y/o irremediablente su nivel de conciencia"

En la Provincia de Bs As, existe un tipo de declaración ante escribano, por la que el paciente deja asentado qué opciones terapéuticas o medidas rechaza, a futuro. En primera mirada, se aproxima a lo que en EEUU se llama "living will" (voluntad en vida, o directivas anticipadas).

Qué pensamos? Qué nos dice nuestra mirada médica? Es siempre claro qué es un paciente terminal, qué es irreversible, qué es desproporcionado, y cuáles son las perspectivas de mejoría?
Lo que se legisla es un "nuevo derecho" o emana de una visión de la persona humana? Hasta ahora, ¿acaso un paciente no podía negarse a un tratamiento? Acaso no tenía derecho de dejar plasmadas sus directivas, prioridades, y decisiones?
Y qué tal es nuestra capacidad médica de pronosticar con más o menos una sombra de precisión o acercamiento? Hablemos los jóvenes y los mayores ya curtidos.

Cuántas incertidumbres!
En el fondo, ¿quién decide?. Y quien decide, lo hace en base a qué evaluación de situación? Cuán precisa y confiable es esa evaluación, proyectada a futuro?

Por qué tenemos legislación para facilitar que se rehúsen tratamientos, mucho antes de tener garantizada la accesibilidad a los tratamientos para aquellos que los necesitan - "terminales" o no? No es curioso?

Por otra parte, hay elementos altamente positivos en las tres iniciativas mencionadas: se clarifica un cauce formal para que el paciente asiente sus preferencias y directivas anticipadas por escrito (Pcia de Bs As), se reconoce que "la Medicina no puede solucionarlo todo", que nos enfrentamos con un Límite, que hay que ponderar riesgos, sufrimientos y beneficios (y costos, agregarán los lectores). Sumemos los "costos humanos" que se pagan en el cuerpo y en la subjetividad. La ley neuquina incursiona sobre métodos y técnicas que podrían avanzar excesivamente sobre el paciente y su autonomía (sedación terminal, deprivación de fluidos).

Dónde está la posición del compromiso profesional? A priori, es difícil delinear un "talle que sirva para todos", pero algunos horizontes son menos brumosos: las acciones que promueven primariamente el debilitamiento del paciente y que acortan la vida requieren un pensamiento y un objetivo: si éste último es acabar con la vida del paciente, parece que cruzamos una delgada línea roja. Los médicos sabemos que ninguna medida terapéutica es inocua, que todo tiene riesgos y efectos adversos: es el balance riesgo/beneficio lo que determina nuestro accionar en pro del paciente. Un paciente en sufrimiento físico o psíquico requiere alivio inmediato, con los medios disponibles en el mejor "estado del arte" médico. Esas medidas son conocidas por los médicos capacitados, y evitan muchos de los escenarios de horror que guarda el imaginario popular (dolor no controlado, disnea severa, y otros). Ninguno de esos medios estará exento de riesgos, y es por eso mismo que deben ser administrados y regulados por un médico capacitado y experto.

Privar de fluidos a un paciente es una decisión pesada. La deshidratación de hecho causa sufrimiento: sequedad de mucosas, dolor, confusión, potencialmente delirio.
La "sedación terminal" no garantiza per se el confort del paciente: según cómo se realice, puede simplemente "tapar la boca" del sufriente. La procesión va por dentro. En tal escenario, habremos negado a nuestro paciente varios componentes básicos de su dignidad, y habremos renunciado a nuestro compromiso profesional de proveer alivio, acompañar y ... cuando fuera realmente posible, curar.

Necesitamos, en las palabras de la Dra Kathleen Foley, experta en dolor y cuidados paliativos, "tratamiento competente del paciente muriente, en vez de suicidio asistido" - o de eutanasia (Foley K. N Engl J Med 1997; 336: 54). Hay un serio problema: estar junto a estos pacientes "salpica": los temas de transferencia, el recuerdo de la certeza de nuestra propia finitud, la tensión que se genera, todo hace que uno sienta la pulsión de "desenchufar todo y terminar de una vez". Pero hay alguien a quien prometimos darle lo mejor, y estamos ahí para honrar esa promesa, con nuestro arte y ciencia.

La mirada en el espejo nos devuelve un rostro, una actitud y una situación: que no nos encuentre "lejos de casa".

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

Saludos,
Pedro

* Nota: Ofrezco enviar copia del análisis del Dr. Gherardi, a pedido, y por e-mail.
El editorial de la Dra Foley también está a disposición, a pedido.

sábado, 7 de noviembre de 2009

Tumores epiteliales tímicos - espectro clínico

Los oncólogos debemos alcanzar adecuado nivel de competencia clínica también en el manejo de neoplasias infrecuentes.
El compromiso tumoral mediastínico se observa más frecuentemente por lesiones secundarias (de primitivos en pulmón, páncreas, gastroesofágicos o testiculares, y por linfomas o leucemias) que por tumores primarios.

Mientras que los timomas se ubican en el mediastino anterior, junto con linfomas, tumores germinales y metástasis de carcinomas, el mediastino medio suele exhibir quistes entéricos, bronquiales y pericárdicos, y linfomas, sarcomas y carcinomas. El mediastino posterior aloja tumores neurogénicos y cáncer esofágico, seguido de lejos por quistes entéricos y neoplasias endócrinas.

La edad de presentación de los timomas incluye un amplio rango, con mayor frecuencia entre la tercera y quinta décadas de la vida. En ocasiones, una radiografía de tórax "de control" descubre el ensanchamiento mediastínico y pone en marcha la secuencia diagnóstica, en un paciente asintomático.

Los tumores tímicos epiteliales (timoma benigno, timoma maligno epitelioide, carcinoma tímico, y un grupo heterogéneo de formas malignas infrecuentes: mucoepidermoide, indiferenciado, queratinizante, a células claras, basaloide, linfoepitelioma y sarcomatoide) han sido ordenados en una clasificación de la OMS, en que los tipos A y AB son benignos histológicamente, y los B y C son malignos.
Casi todos los timomas ocurren o se inician en el mediastino anterior, y se prefiere la expresión "invasor" o "no invasor" a los términos "benigno" y "maligno". El compromiso secundario más común es en pleura, pulmón y pericardio, más la invasión de estructuras vecinas. Las localizaciones secundarias extratorácicas son raras. Aproximadamente la mitad de los pacientes presentan componente quístico en las lesiones; algunas, con calcificación.

La asociación con síndromes sistémicos (paraneoplásicos) es frecuente: miastenia gravis, polimiositis, colitis ulcerosa, síndrome de Sjögren, miocarditis, y una variedad de disfunciones endócrinas (t¡roidea, paratiroidea, adrenal, hipofisaria). Los cuadros hematológicos paraneoplásicos más frecuentes son la aplasia eritrocitaria, pancitopenia, y megacariocitopenia, así como hipogamma-globulinemia y anemia perniciosa.

La clásica estadificación según Masaoka sigue utilizándose: estadío I: completamente encapsulado, sin invasión capsular microscópica. Estadío II invasión macroscópica de la cápsula, grasa adyacente o pleura mediastínica; III: invasión macroscópica de pericardio, grandes vasos, pulmón; IVa: diseminación pleural, y IVb: metástasis linfáticas o hematógenas.

La base de la terapéutica es la resección oncológica, completa. Esto no es posible en un porcentaje importante de pacientes. El rol de la resección subtotal es controvertido. La radioterapia (dosis totales de 60 Gy en 6 semanas) brinda control clínico temporario en la enfermedad extendida.

La enfermedad es quimio-sensible (tasas de respuesta publicadas entre 20 y 45%) y se han estudiado diversos esquemas, mayormente en series de menos de 80 pacientes, en ensayos no controlados. Cisplatino, doxorrubicina, ciclofosfamida (PAC), doxorrubicina, vincristina, ciclofosfamida (VAC), con o sin agregado de cisplatino, cisplatino/ etopósido, carboplatino / etopósido son los más utilizados. Los corticoides agregan beneficio sintomático, especialmente en pacientes con miastenia.

Especialmente en las formas clínicas "encapsuladas", en estadíos precoces, completamente resecadas, con perfil histológico favorable, es alcanzable la supervivencia a largo plazo con buena calidad de vida.

En otras palabras, debemos estar atentos para emplear las medidas diagnósticas y terapéuticas adecuadas, funcionando en equipo con otros especialistas.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

sábado, 31 de octubre de 2009

Cuidado profesional, competente, de pacientes murientes, en vez de suicidio asistido

Es difícil la búsqueda de un camino racional de discurso al abordar este delicado tema, con un debate tan polarizado y recalentado. No es para menos: las necesidades de los pacientes murientes y de sus familias, los temas candentes, de la libertad individual, calidad, dignidad y espiritualidad de la vida, y el apasionamiento que todo esto genera, elevan el voltaje de la discusión.

Si comenzamos por el paciente, pocas son las situaciones vitales en que éste se encuentre más vulnerable. Cómo cumplir con el alto llamado médico, formulado impecablemente por la Dra Kathleen Foley, en un editorial en N Engl J Med:
http://content.nejm.org/cgi/content/full/336/1/53 , en el sentido de proveer "la mejor calidad posible de vida mientras se muere"?

Si nos referimos al "mundo real" en que los médicos nos ocupamos de los pacientes murientes, las decisiones de retirar (o no iniciar) algunos tratamientos considerados innecesarios, futiles, contraproducentes o inapropiadamente agresivos para la situación clínica son responsabilidad médica (asumida en consonancia con los deseos del paciente), con la intención de no agredir ni maltratar sin sentido. Claro que estas decisiones deben ser ponderadas con tanta compasión como sabiduría y competencia clínica. Simultáneamente, se buscará controlar el dolor y, en general, el sufrimiento físico (por ejemplo, ansiedad, disnea, prurito, etc) con los medios que el estado del arte médico ofrece, y con una meticulosa y profesional atención al detalle.

Con este doble abordaje (no hacer lo que no conviene, y sí hacer, intensamente, lo que es necesario), el médico sigue el axioma del poeta Mario Benedetti ("apartando lo inútil, y usando lo que sirve), y al mismo tiempo, "la intención del médico es brindar cuidado (profesional), no muerte" (K. Foley, publicación citada en el link previo, NEJM 1997; 336: 54; palabra entre paréntesis y en negrita es un agregado personal).

No interesa lo que decida una corte judicial; lo que los médicos competentes en cuidado de pacientes murientes practican es paliación, alivio del sufrimiento, apoyo, control sintomático, medidas de confort, cuidados paliativos (como lo llamen, aunque hay nombres mejores que otros), pero eso no es suicidio asistido, ni eutanasia.

El paciente muriente se halla rodeado de un "entorno tóxico": el ambiente está enrarecido, pesado. Las demandas parecen infinitas. Es mucho para uno solo. Por otra parte, la voluntad de comprometerse en la atención de estos pacientes - y de persistir a su lado - depende de numerosos factores, entre los que se cuentan los valores personales, los sesgos de especialización, el entorno de práctica clínica, temas de transferencia, perspectiva sobre el uso de recursos, y presiones de todo tipo. Los conflictos de intereses pueden ser abrumadores si la institución o la cobertura resultan empleadores de los profesionales que deben tomar decisiones, y si en tal capacidad ejercieran presiones. Dos monstruos acechan, como Escila y Caribdis amenazaban la barca de Ulises y sus compañeros: la sobre-prestación (hacer de más, para facturar más) y la sub-prestación (hacer de menos, porque "ya está todo pago"). No solo la muerte exhala su aliento helado, como vemos. La sociedad, los terceros pagadores, los familiares, los amigos, los colegas, todos quieren orientar las decisiones. Es un momento de verdad.

Más allá de posiciones personales, y casi con cualquier marco filosófico, apurarse a hablar de suicidio asistido o de eutanasia sin haber brindado el máximo de lo disponible en el estado del arte médico es una falta ética grave.

Aliviar el sufrimiento, sostener gentilmente en los momentos finales, resistir el impulso a decidir por la vida de otros - a la par que se brinda el mayor confort y alivio médicamente posible, con respeto a las convicciones, visión de mundo y espiritualidad del paciente, éste es nuestro desafío.

Como siempre, será muy enriquecedor abrir esto al debate.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi


viernes, 30 de octubre de 2009

Oncología y la Matrix

Del mismo modo que en la película, una es la realidad percibida y otra la oculta. La revolución biotecnológica nos acerca una promesa y un desafío: reescribir las reglas de la Oncología (en realidad, de la Medicina toda), re-delimitar enfermedades en base a su identificación genético-molecular, y establecer, del mismo modo que en una red social de Internet, delicados y complejos entramados de asociaciones de enfermedades, también en base a su perfil genético-molecular. En otras palabras, se (re)construye el mapa de vinculaciones entre enfermedades.

Varias consecuencias interesantes surgen de este cambio de paradigma: ya no será cierto que "what you see is what you get", o en otras palabras, que cuadros clínicos similares y patrones histológicos similares podrán tener orígenes muy diferentes - y tratamientos muy disímiles. En el campo de los sarcomas, linfomas y leucemias, esto ocurre desde hace rato. Hoy nos preguntamos, molecularmente, "cuántos cánceres de mama hay". Da comienzo una era.

En segundo lugar, la renovación conceptual forzará a muchos profesionales a ponerse al día, y hará más difícil continuar funcionando en la práctica como si nada hubiese cambiado. Al menos un par de generaciones de oncólogos se enfrentarán a la necesidad de profundo compromiso en su educación médica continua - o a la virtual extinción como especialistas a ser consultados. Cambio de aire.

"Corren buenos tiempos para equilibristas", cantaba Joan Manuel Serrat. Lo viejo y conocido estará cambiando muy rápidamente, y dará una oportunidad ventajosa a los jóvenes especialistas y a los jóvenes médicos en formación: se está reescribiendo la Medicina, y permanecerá lo más valioso, lo que supere la prueba del tiempo.

"Corren tiempos fabulosos"... continuaba Serrat. En este cambio de progresiva intelectualización, no deberemos olvidar los aspectos subjetivos. El Sujeto que espera, el paciente. Y en una dimensión amplia, persistirá o aumentará el desafío de llevar los beneficios del progreso (del progreso real, por favor!; del progreso bien entendido y no del pseudo-progreso de los tratamientos "me-too" o de "beneficio clínico aún no establecido". Las agencias regulatorias tienen gran responsabilidad en asegurar una varilla de calidad en el beneficio clínico y en el balance entre eficacia y toxicidad. Por otra parte, la estampida de precios no puede ser sostenida por ningún país del planeta. Algo (alguien) tendrá que ceder.

De otro modo, correrán buenos tiempos "para los de siempre, para los mismos de siempre". Y no queremos eso. Crisis, cambio, oportunidad. Tiempos fabulosos.

Cordialmente,
Pedro Politi

martes, 20 de octubre de 2009

Aprobaciones recientes de la FDA

La FDA decidió aprobar recientemente:

- un antimetabolito, denominado genéricamente: pralatrexato (un antifolato; Folotyn, nombre comercial) para la terapia de linfomas periféricos a células T, en segunda línea.

- un compuesto biológico recombinante, denominado rasburicasa, para reducir el riesgo de insuficiencia renal aguda en neoplasias altamente respondedoras a quimioterapia (mayormente, neoplasias hematológicas). El producto es costoso, pero la insuficiencia renal aguda y la hemodiálisis de emergencia son aún más costosas... y no salvan a todos, en leucemias agudas y linfomas no-Hogkin de alto grado.

Vivimos - lamentablemente - en un mundo dominado por expectativas de lucro. Mientras "el modelo" no cambie, vamos a tener incrementos mínimos en eficacia, a expensas de "verdaderas fortunas" en incremento de costos.

Una calesita loca...

Todo muy bueno e interesante, pero...alguien va a tener que poner límites a esto.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

domingo, 11 de octubre de 2009

Nuevos blancos moleculares en la terapia del cáncer

En las III Conferencias sobre Nuevos Blancos Moleculares en la terapia del cáncer, realizadas en Buenos Aires el 1 y 2 de este mes.

Las presentaciones más orientadas a las terapias en etapas precoces de investigación clínica fueron señaladas por el Dr. Alex Adjei y el Dr. John Wright. En cáncer de pulmón a células no pequeñas, se estima que más de 50% de los casos nuevos exhiben mutaciones de oncogenes conocidos. Con una proyección de 219.000 casos para el año en curso, esto implica un potencial de aplicación clínica importante, aún si una nueva terapia fuese aplicable sólo al 10-15% de los pacientes. Como se mencionó en artículos previos, aproximadamente 10% de los cánceres de pulmón a células no pequeñas exhiben mutación del receptor, EGFR, en tanto que hasta 35% de los tumores en nunca-fumadores la tendrían (en la población de los EEUU; en Asia, probablemente hasta el doble). Se señaló que un mecanismo de resistencia a los inhibidores de tirosina-quinasa acoplada al EGFR involucraría la amplificación del oncogen c-Met, que puede activar la cascada de señalización de EGFR vía PI3K/ Akt (fosfatidil inositol 3 quinasa).
También HER-3, que se hetero-dimeriza con HER-1 para activar esta última cascada, además de la vía de RAS. Será interesante observar los ensayos clínicos precoces de un anticuerpo monoclonal anti-HER-3, completamente "humanizado" en su estructura primaria.

La vía de m-TOR ("blanco molecular de la rapamicina": esto recuerda que los fármacos pueden ser excelentes herramientas de descubrimiento en la Biología), regulador que se halla "aguas abajo" de Akt en la cascada de señalización intracelular, determina activación de RAS, proteínas G acopladas a receptor, PTEN y otros. En particular, m-TOR se liga a dos grupos importantes de moléculas reguladoras: TORC 1 y 2. Esta última se ubica "aguas arriba" de Akt, mostrando cuánta redundancia y qué grado de multiplicidad y diversificación tienen las cascadas de señalización celular. También nos hace dudar, a priori, sobre la posibilidad de controlar un trastorno tan complejo como un cáncer del adulto con sólo un inhibidor de un blanco molecular aislado: se impondría un abordaje combinado, al menos, en teoría.

Un inhibidor oral de PI3K que motiva interés es el agente denominado XL147 (Exelixis). Inhibe la fosforilación de la quinasa vinculada a receptores de membrana, ERK. En la clínica, se asocia con rash cutáneo e hiperinsulinemia. Otro compuesto oral relacionado, XL-765, causa hiperglucemia, y sus toxicidades limitantes son: rash, fatiga, náusea y vómito.

El receptor al factor de crecimiento insulino-símil (IGF1-R) también genera interés como blanco terapéutico, dado su rol en el estímulo a la proliferación celular. Un anticuerpo monoclonal completamente "humanizado", el figitumumab, se halla en investigación clínica temprana.

El Dr. John Wright (US National Cancer Institute) resumió ensayos clínicos con la vacuna terapéutica anti-EGFR, denominada CDX-110, formulada con el adyuvante KLH. Un ensayo precoz en glioblastoma multiforme (GBM) con temozolomida + radioterapia, con el apoyo del NCI, mostró incremento en el tiempo a la progresión de enfermedad. Esta vacuna ha sido adquirida por Pfizer, y según manifestó un funcionario de esa empresa, no hay planes actuales para llevarla a ensayos clínicos en cáncer de pulmón, pero sí en cáncer de cabeza y cuello.

El Dr Wright se refirió también el anticuerpo monoclonal anti-VEGF, bevacizumab, en la terapia de segunda línea de pacientes con GBM, que llevó a la aprobación regulatoria de la FDA para esta indicación. Señaló que los niveles circulantes de VEGF correlacionan con el grado tumoral en glioma, y son mayores en GBM recaído. El diseño del ensayo pivote para la FDA fue muy curioso, ya que incorporó un citotóxico nunca considerado estándar ni estudiado formalmente en segunda línea: el irinotecan (este fármaco ha sido aprobado en cáncer colo-rectal avanzado o metastásico, y su combinación con cisplatino es equiefectiva con etopósido-cisplatino en cáncer pulmonar a células pequeñas). En resumen, el ensayo en GBM comparó bevacizumab 10 mg/kg cada 2 meses versus bevacizumab+ irinotecan 125 mg/m2 cada 14 días. La combinación no mejoró la sobrevida libre de progresión ni la supervivencia global, sino solamente la respuesta objetiva (de 28 a 38%). Se observó reducción de la dosis requerida de corticoides (como un indicador indirecto de efecto anti-edema vasogénico).

Lo curioso es que el compuesto a evaluar (y finalmente aprobado) "no fue comparado con nada", a los fines de decidir la aprobación. De hecho, las diapositivas del Dr. Wright compararon estos resultados con controles históricos - una comparación que fue airadamente rechazada cuando semanas después, otro Comité Asesor de la FDA examinó la presentación de un agente citotóxico que buscaba aprobación para la leucemia aguda en pacientes mayores de 65 años. En otras palabras, si bien se trató de comités de diferente composición, la FDA aceptó para el bevacizumab un criterio que luego rechazó para otro antitumoral - y ambos, en patologías serias, con importante riesgo vital. Algo requiere clarificación en los mecanismos de la FDA.

En otra presentación, en un simposio patrocinado por un laboratorio, el Dr. Adjei pasó revista a ensayos clínicos aleatorizados con bevacizumab en cáncer de pulmón. El conocido ensayo del grupo ECOG, E-4599, que comparó paclitaxel / carboplatino con o sin el agregado de bevacizumab 15 mg/kg - continuando el anticuerpo en mantenimiento, hasta progresión o toxicidad inaceptable- mostró sólo dos meses de diferencia en supervivencia global. Más aún, no hubo ninguna ventaja en supervivencia global con bevacizumab agregado a quimioterapia: mayores de 70 años. Este ensayo en particular tuvo como criterios de exclusión: carcinoma epidermoide, hemoptisis reciente, insuficiencia cardíaca congestiva, anticoagulación, angina de pecho, tromboembolismo, y metástasis en el sistema nervioso central.
Estos resultados motivaron un ensayo de fase II para reexplorar la eficacia y seguridad de este esquema combinado en pacientes de 70 o más años de edad, performance status <2.

Que la hemoptisis puede ser un evento adverso grave surgió de los resultados de un ensayo de fase II aleatorizada en 99 pacientes, en que se replicó el diseño del ensayo E-4599 en menor escala, pero permitiendo el ingreso a pacientes con carcinoma epidermoide (Johnson BH et al. J Clin Oncol 2004 Jun 1;22(11):2184-91). En este ensayo, la presencia de hemoptisis severa fue más frecuente en pacientes con tumor de histología epidermoide, o con lesiones cavitadas o con necrosis. Para prestar atención.

Otro ensayo clínico, denominado AVAIL, asignó al azar los pacientes a bevacizumab 7.5 o 15 mg/kg, o bien placebo, cada 3 semanas, más quimioterapia con gemcitabina 1250 mg/m2 + cisplatino 80 mg/m2 por hasta 6 ciclos de quimioterapia, con bevacuzumab hasta la progresión (Reck M, et al. J Clin Oncol 2009 Mar 10;27(8):1227-34). Ambas dosis de bevacizumab (agregado a quimioterapia, y en mantenimiento) fueron superiores a placebo (más quimioterapia) en términos de tasa de respuesta objetiva (34% y 30% con bevacizumab versus 20% con quimioterapia y placebo) y en sobrevida libre de progresión, pero la dosis más alta del monoclonal no proveyó beneficio adicional en ninguno de estos dos aspectos, por lo que es razonable pensar que, si se considerase usarlo (ver comentarios abajo), 7.5 mg/kg cada 3 semanas provee similares resultados - a la mitad del costo que la dosis empleada en el ensayo E-4599. ¿Alguien estará tomando nota? El número de pacientes enrolados fue de 1.043.

Una evaluación de la base de seguridad del laboratorio patrocinador sugería que el riesgo de sangrado cerebral en pacientes con metástasis cerebrales de cáncer de pulmón que recibieron bevacizumab sería de 1% en al menos un ensayo. Este año, la EMEA removió la restricción para administrar bevacizumab pacientes con cáncer pulmonar y metástasis cerebrales controladas.

Es posible que tanto esfuerzo de marketing para persuadirnos de utilizar un producto de más de 10.000 dólares mensuales para acceder a uno o dos meses de supervivencia global no solucione ninguno de los problemas más urgentes de los pacientes.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi


sábado, 10 de octubre de 2009

Recomendaciones sobre administración de terapias oncológicas

Recientemente, un comité conjunto de la Sociedad de Enfermería Oncológica (ONS) y la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO) publicó recomendaciones referentes a la administración de quimioterapia y terapia biológica antitumoral. Estas recomendaciones cubren aspectos de documentación necesaria, sistemas de órdenes médicas, aspectos físicos, educación y entrenamiento del personal, recepción, conservación y reconstitución de los fluidos a administrar, seguridad y medidas disponibles para casos de reacciones agudas, etc.

El texto completo se halla disponible en: http://jco.ascopubs.org/cgi/reprint/JCO.2009.25.1264v1
y puede accederse también a partir de www.pubmed.com, solicitando "recommendations ASCO ONS chemotherapy administration".

Mi sugerencia es imprimir el texto y especialmente las tablas con recomendaciones concretas. Entre ellas, sobresalen, en mi opinión, las siguientes:

1. no se aceptarán órdenes verbales, salvo las vinculadas a ajustes o indicaciones ante situaciones que surjan durante o luego de la infusión de tratamiento. En otras palabras, todo escrito y documentado, salvo emergencias (y allí, se documentará luego de atendida la emergencia).

2. claridad en las indicaciones médicas. Uso de formularios preimpresos o preeditados para ayudar con las indicaciones reiterativas, información identificatoria del paciente, peso, talla, superficie corporal, esquema de tratamiento, día del ciclo, y terapia a administrar discriminada por día. Nota destacada sobre hipersensibilidad o alergia a fármacos, si hubiera, más enfermedades asociadas relevantes (insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal, diabetes, enfermedad coronaria o cerebrovascular, etc).

3. adecuada documentación, en la historia clínica, previamente a la administración de terapia: copia de la anatomía patológica en al menos un sector de la historia clínica, y/o comentario en la evolución, con diagnóstico y estadío de la enfermedad.

4. médico disponible fácilmente, o presente en el área, durante la administración. Esto no se ve habitualmente, si bien las instituciones cuentan con médicos de guardia - a veces, a varios pisos de distancia, y muy atareados en otras urgencias. En otras palabras: ¿quién se hará cargo de una reacción severa o un evento adverso serio? (además de la omnipresente labor de Enfermería, por supuesto!).

5. disponibilidad de equipo de resucitación / reanimación ("carro de paro") y re-entrenamiento anual de todo el personal en Reanimación Cardio-Pulmonar (RCP).

Recuerdo claramente algunas discusiones en el ministerio de ¿salud?, en ocasión de alguno de los tantos desaguisados del 2001 (y siguientes) : surgió en alguna mente la idea de "regular" la administración de quimioterapia, requiriendo estándares mínimos. Pero de ningún lado surgía que se fueran a proveer fondos para adecuar ediliciamente, equipar y entrenar. Fue una clara visión de cómo "se dirige desde el microcentro de Buenos Aires".

En esta oportunidad, podríamos examinar cómo se manejó la comunidad europea para "nivelar hacia arriba" los estándares de atención oncológica (y de otras áreas de la salud), con sus numerosos y dispares estados miembros.

Recomendaciones razonables, que brinden seguridad a los pacientes, alienten el mayor profesionalismo, y colaboren para el logro de los mejores resultados. Y presupuesto para lograrlo, sin duda. Ahora que el gobierno asignó 600 millones de pesos a la televisación del fútbol - y reduce en 500 millones el presupuesto de Salud nacional, será necesaria una clara comprensión de lo que está en juego. Es nuestro compromiso profesional hacer todo lo que esté a nuestro alcance para salvaguardar la seguridad de nuestros pacientes.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

miércoles, 7 de octubre de 2009

Selección terapéutica basada en perfil genético-molecular

La tercera edición de las Conferencias Interamericanas de Oncología en Buenos Aires subrayó el rol del perfil genético-molecular tumoral para la toma de decisiones terapéuticas.

Diversos expositores de primer nivel, tales como el Dr. Joseph Lenz (USC Morris Cancer Center, California, USA), el Prof. Alex Adjei (Consultor de la Clínica Mayo), el Prof. Franco Muggia (NY University, NY) y el Dr. John Wright (US National Cancer Institute), así como los co-organizadores, Dres. Carlos Arteaga (Vanderbilt Univ) y Román Pérez Soler (Albert Einstein College of Medicine, NY), enfatizaron el valor clínico de establecer un mínimo "mapa molecular" para identificar potenciales blancos terapéuticos y optimizar la selección de tratamiento.

Es creciente el número de estudios genético-moleculares disponibles en la práctica de la Oncología Clínica, y es justo reconocer que por muchos años esta especialidad ha ido a la zaga de la Oncohematología en este aspecto.

En la actualidad, es posible examinar el status del oncogen K-RAS en tacos de parafina (no teñidos) para la toma de decisión sobre el uso de cetuximab (anticuerpo monoclonal anti-EGFR; anti-receptor a factor de crecimiento epidérmico, o HER-1) en cáncer colo-rectal avanzado o metastásico o recaído: los pacientes cuyo tumor exhiba K-RAS mutado no se beneficiarán de la adición de cetuximab, pero como bien se aclaró (Dr. Lenz), la presencia de la mutación no conlleva un pronóstico diferente en términos de supervivencia o resultado clínico, sino que es simplemente un "factor predictivo" de ausencia de respuesta al cetuximab.

En cáncer pulmonar a células no-pequeñas (un 85% de los casos), la presencia de determinadas mutaciones en el gen del EGFR, tales como la deleción del exón 19, o la mutación L 858R, resulta un factor predictivo de respuesta a inhibidores de tirosina-quinasa acoplada al EGFR (gefitinib o erlotinib). En tal sentido, el Prof. Adjei recordó que la prevalencia de estas "mutaciones favorables" del EGFR se hallan en 10-15% de los cánceres pulmonares a células no pequeñas en EEUU - si no se realiza ningún tipo de selección de pacientes. En contraste, entre los "nunca fumadores", la prevalencia de estas mutaciones es de 30% en EEUU y llega a 60-65% en Asia.
En otras palabras, los criterios clínicos de preselección orientan, pero la mejor conducta es solicitar el test genético para decidir la terapia con los costosos inhibidores de tirosina-quinasa. Cabe recordar que quienes no presentan una de las mutaciones favorables en su tumor pulmonar tienen mínima o nula chance de beneficiarse con estos fármacos.

Una alternativa al estudio directo de las mutaciones (involucra extracción, amplificación y secuenciación o análisis de fragmentos) sería el estudio FISH (hibridización in situ fluorescente), para examinar si hay amplificación del gen de EGFR/HER1. La amplificación del gen también es un factor predictivo de respuesta a inhibidores de tirosina-quinasa.

El nivel de expresión de la enzima reparadora del ADN, denominada ERCC1 (enzima de "excisión-reparación") también es útil para predecir respuesta (o falta de ella) a derivados de platino, tanto en cáncer de pulmón como en cáncer epitelial ovárico.

Estos tests se hallan disponibles en laboratorios de Biología Molecular en la Argentina, y su costo es inferior al de una tomografía multi-detector, por lo que su empleo resulta altamente costo-efectivo y facilita una selección terapéutica racional.

Por lo visto, vamos hacia establecer un perfil genético-molecular para mejorar la "taxonomía" de las neoplasias malignas sólidas, identificar los pacientes con mayor chance de beneficio clínico con una terapia en particular, y administrar mejor los recursos, evitando a los pacientes la toxicidad y la demora en que se incurriría si se indicase una terapia "predestinada" a ser inefectiva.

En otras palabras, el mito de Cassandra. La pregunta es (tanto para ella como para Apolo, quien según la leyenda griega, le obsequió ese don): alguien estará prestando atención?

Atentamente,
Dr. Pedro Politi

viernes, 2 de octubre de 2009

III Conferencias Interamericanas de Oncología en Buenos Aires

Esta es la tercera de la nueva serie de Conferencias Interamericanas de Oncología, que tienen lugar en Bs As cada dos años. Un grupo de investigadores clínicos de primer nivel, residentes en Norteamérica y Europa, nos visitan periódicamente para traer novedades en el campo del desarrollo de terapias dirigidas contra nuevos blancos moleculares, en cáncer humano. Se configura así un encuentro especialísimo, en que el abordaje incluye aspectos moleculares y consideraciones de ciencia básica, avances y dificultades en el desarrollo clínico precoz de nuevas moléculas, y reflexiones sobre estándares terapéuticos establecidos, a la luz de ensayos clínicos de fase III recientemente presentados o publicados.

La historia de estos encuentros es larga: la versión previa de estas conferencias comenzó en el año 2000 por iniciativa del Dr. Adrián Senderowicz, médico investigador argentino radicado en USA. Luego de tres reuniones, la coordinación científica pasó a ser organizada por los Dres Ramón Pérez Soler (N York) y Carlos Arteaga (Tennessee, USA), con participación de expertos norteamericanos, europeos y latinoamericanos de prestigiosos institutos de investigación clínica. El importante número de expositores de alta jerarquía, así como la variada gama de sub-especializaciones y campos de investigación cubiertos hacen de estas Conferencias un encuentro imperdible. La cita es cada dos años, en Buenos Aires, en octubre.

Ayer tuvo lugar el primer día de las Terceras Conferencias. Adjunto un comentario breve y minimo. El comentario del segundo y último dia, en la semana entrante.

Saludos cordiales,
Pedro Politi


Con la impecable organización de Andrea Blanco y equipo, tuvo lugar la III serie de Conferencias, esta vez en el Hotel Alvear de Bs As.

El primer bloque de la mañana , titulado "Nuevas terapias antineoplásicas I", comenzó el Dr. Hernán Cortés Funes, médico argentino, director de Oncología en el hospital 12 de Octubre en Madrid, con el tema: "Nuevos compuestos marinos".
El producto más importante fue la ectenascidina (Yondelis), aprobado en Europa para sarcoma de partes blandas en segunda línea, recaído o refractario a doxorrubicina (con o sin ifosfamida) y también en segunda línea para cáncer epitelial ovárico (en combinación con doxorrubicina liposomal).
Estas indicaciones no fueron reconocidas por la FDA aún, pero sí por ANMAT.

El perfil de toxicidad de la droga, administrable en infusión de 3 hs cada 21 días (1.3 a 1.5 mg/m2), o bien en infusión de 24 hs cada 21 días, a una dosis levemente menor (1.1 a 1.3 mg/m2/24) incluye astenia, mielosupresión grado 3 o 4, elevación de transaminasas. Pero no alopecia. Se administra junto con dexametasona.
En sarcoma, la trabectedina es más activa en infusión de 24 hs.
En cáncer de ovario, el producto es más activo en enf recaída sensible a platino.
No queda claro qué marcadores tumorales serían predictivos de respuesta en ca ovárico, pero en sarcoma, la presencia de una proteína de fusión, resultado de translocación t 9, 22, parece ser predictiva de beneficio clínico, especialmente en liposarcoma y leiomiosarcoma.


Hay una variedad de productos de origen marino en evaluación clínica, incluyendo la Aplidina, y la hexahalide F, en fase II en diversos tumores sólidos.

El Prof. Alex Adjei, del Roswell Park Cancer Inst en Buffalo, N York, presentó un panorama de moléculas de interés, en etapas clínicas precoces de desarrollo, incluyendo fármacos que actúan sobre la cascada de señalización de MEK, que a su vez es una tirosina-quinasa acoplada a receptor, vinculada con la señalización via RAS, RAF y ERK. Algunos de los productos son CI 1040, excesivamente tóxico, y compuestos orales de Pfizer y Astra Zeneca.

El oncogen BRAF mutado es otra vía de señalización, cuya inhibición en melanoma metastásico logra importantes respuestas como agente único. El fármaco, PLX 4032.

La vía del receptor a FGF es vulnerable a manipulación con un receptor soluble acoplado a un monoclonal ("trampa de VEGF"), de modo de secuestrar el ligando, FGF, de su interacción con el receptor.

Otro inhibidor interesante es una molécula que estimula la acción de un gen denominado "hedgehog", (erizo, puercoespín) descubierto en la mosca, y presente en humanos. Este gen determina el ordenamiento de estructuras en el macizo facial, y cuello de embriones. Su manipulación tiene efecto antitumoral en neoplasias sólidas humanas.

El Dr. Román Pérez Soler, co-organizador de las conferencias, y Profesor de Oncología de la Univ de N. York, se refirió a biomarcadores en cáncer de pulmón. Resaltó la heterogeneidad de esta patología, subrayó el valor terapéutico de identificar las cascadas de señalización en el tumor de cada paciente para guiar la selección de la terapia. En particular, los pacientes con cáncer pulmonar avanzado (no a cel pequeñas) portadores de mutaciones del gen de EGFR (receptor al factor de crecim epi´dermico) parecen más sensibles a los efectos de los inhibidores orales de tirosina-quinasa acoplada al EGFR (erlotinib y gefitinib). En contraste, quienes no presentan estas mutaciones, no suelen beneficiarse con estas costosas terapias, y harían mejor en recibir quimioterapia, como lo muestra un reciente ensayo aleatorizado en Asia (NEJM 2009) que comparó gefitiib vs paclitaxel/carbo en pulmón avanzado, primera línea. El mensaje, claro: si no hay mutación que confiera sensibilidad a inhibidores de tirosina-quinasa ligada al EGFR (deleción del exon 19, o mutación L 858R), entonces NO vale la pena usar erlotinib o gefitinib.

Otros marcadores moleculares en ca pulmonar se hallan en evaluación clínica: ERCC1, enzima reparadora del daño al ADN, tubulina, topo II, ribonucleótido-reductasa (predeciría sensibilidad a gemcitabina).

El cetuximab y el bevacizumab no brindaron beneficio clínicamente relevante en cáncer de pulmón: cetuximab, más vinorelbina/cisplatino en primera línea, incrementó la supervivencia global mediana en un mes (ensayo FLEX, ASCO 2008), en tanto que el bevacizumab "prolongó significativamente" la sobrevida en... 15 días.

Es interesante reflexionar sobre esta paradoja: los anticuerpos monoclonales cetuximab (anti-EGFR) y bevacizumab (anti-VEGF) incrementan la tasa de respuestas objetivas y prolongan el tiempo a la progresión, cuando se utilizan combinados con quimioterapia (FOLFOX, FOLFIRI) en cáncer colo-rectal avanzado o metastásico, y las "pequeñas moléculas", inhibidoras de tirosina-quinasa no son útiles en esa enfermedad neoplásica. En contraste, sucede lo inverso en cáncer de pulmón avanzado a células no-pequeñas: los anticuerpos monoclonales son marginalmente útiles (y eso es ser muy generoso en la evaluación) en tanto que los inhibidores de tirosina-quinasa tienen un rol - exclusivamente en un subgrupo definido con bases genético-moleculares.

Continuaremos en unos días.

Saludos,
Pedro Politi

martes, 15 de septiembre de 2009

Medicamentos falsificados o adulterados

Las recientes denuncias sobre falsificación y adulteración de medicamentos de alto costo (oncológicos, anti-retrovirales, biológicos, factores de coagulación para hemofilia y otros) en la Argentina dan estado público a una situación insostenible de extrema perversidad: la ambición de lucro, elevada por encima del respeto a la vida.

Uno de los casos de alta notoriedad pública se halla bajo revisión judicial, por lo que sería inapropiado adelantar hipótesis o consideraciones específicas. Sin embargo, en términos generales, cabe reflexionar que la sociedad y los profesionales de la Salud no supimos descifrar "la escritura sobre la pared": que el mercado no puede erigirse en divinidad todopoderosa; que la ambición de lucro es incapaz de cuidar de la salud de nadie, y que el abandono de un modelo sanitario, más una necesaria cadena de complicidades nos ha llevado a este bajo fondo, en que la ética es sirvienta de la búsqueda de la ganancia. De la caja, en resumidas cuentas.

Vale aclarar que un incentivo poderoso para los inescrupulosos ha sido el elevado precio unitario de los productos señalados al inicio de este comentario (miles o decenas de miles de pesos por envase), resultado de una verdadera carrera en pos de ganancias extraordinarias, que a su vez satisficieran el apetito de lucro de accionistas, ejecutivos, y gurúes.

Los médicos contamos con muy pocas herramientas intelectuales y prácticas para detectar falsificación o adulteración, como no sea el uso atento de los sentidos, para notar cambios de color, aspecto, turbidez, o alteraciones en el envase de un producto.

El rol del Estado es crítico en este tema, ya que es el actor que puede dictar normas, hacer cumplir las existentes, y desempeñar un rol activo de vigilancia, detección y sanciones ejemplares. Para el Estado, la expresión "ausente" sería excesivamente benevolente, ya que hay una percepción social muy amplia que ubica al Estado de las últimas varias décadas como una pieza clave, un verdadero garante institucionalizado del status quo. Sin su aquiescencia, sin lograr que aparente mirar hacia otro lado, cuando no sostenga o directamente dirija el saqueo, muchas de estas vergüenzas y delitos serían imposibles, o al menos muy difíciles, o no escaparían a su pronto y ejemplificador castigo. El que las hace, las paga, debería ser un lema. Pero hay otro mejor: acciones preventivas. La calidad no es aprobar un control, sino un proceso continuo. Si al inicio no se logra calidad, no sirve a nadie desechar el lote de producto al detectar un problema grave antes de darle salida de la planta manufacturera. Pero esta consideración supone un error, una desviación de ciertas normas de procedimiento. Muy otra cosa es la deliberada adulteración o falsificación. En este último caso, hay una total desaprensión por el destino de los pacientes que utilizarán estos fármacos. Hay delito en la intención, hay desprecio por la vida.

La desafortunada percepción social que hace del diagnóstico de cáncer, HIV u otra enfermedad grave un sinónimo de sentencia de muerte, también opera en el imaginario colectivo y brinda una pátina de cobertura, de - si se pudiera - cuasi-comprensión (errónea, terrible y torturadora) : "si total, se mueren todos".

Todos morimos algún día. Pero ninguna consideración justifica el homicidio.

Seguramente los lectores podrán enriquecer el debate.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

sábado, 5 de septiembre de 2009

Decisiones del Comité Asesor de Drogas Oncológicas de la FDA

Los días 1 y 2 de setiembre, el Comité Asesor de Drogas Oncológicas (ODAC, por sus siglas en inglés) convocado por la FDA, recomendó mayoritariamente rechazar la presentación de los laboratorios Genzyme y Vion, sobre el agente alquilante laromustine para la terapia de leucemia mieloide aguda de novo en pacientes mayores de 60 años. La presentación se basó en un ensayo no controlado, con el argumento que estos pacientes mayores, frágiles y a menudo malos candidatos para la terapia de inducción estándar no estarían en condiciones de ser aleatorizados a la misma. El comité rechazó esta premisa e indicó la necesidad de un ensayo formal de fase III.

En otro orden de cosas, el comité aprobó mayoritariamente (10 votos contra 4) la presentación del laboratorio Allos, sobre el antifolato pralatrexate, en la terapia de un conjunto de linfomas T cutáneos. Si bien hubo discusiones sobre la documentación de algunas respuestas parciales y completas (27% en esta población sin un tratamiento estándar reconocido), se impuso la posición favorable a la aprobación del fármaco.

La FDA no está obligada a seguir las recomendaciones del comité, pero a menudo obra en consoncancia con las recomendaciones de éste. Se espera una decisión regulatoria antes de fines de este mes. Si el pralatrexate fuese aprobado, sería el primer fármaco para linfomas T cutáneos.

sábado, 22 de agosto de 2009

Alternativas no-quimioterapia en cáncer de pulmón

El paisaje de los ensayos clínicos está siendo modificado: moléculas pequeñas, activas por vía oral, inhibidoras de un sector de la cascada de señalización celular, parecen recuperar la iniciativa. Pero persiste la duda: ¿están listas para ocupar el centro de la escena?

Dos inhibidores orales de la tirosina-quinasa acoplada al receptor al factor de crecimiento epidérmico (EGFR) han sido aprobados por la FDA y la EMEA hace unos años para la terapia de segunda línea en cáncer de pulmón: gefitinib (de Astra Zeneca) y erlotinib (de OSI/Genentech/Roche).

Los primeros ensayos clínicos con gefitinib parecían interesantes, pero este fármaco no logró prolongar la supervivencia de pacientes con enfermedad avanzada o metastásica (Thatcher et al. Lancet 2005;366:1527-1537; ensayo ISEL), y fue dejado de lado a los fines prácticos, al menos en los Estados Unidos. La controversia, en su momento, fue sobre la búsqueda de una explicación para el (modesto) efecto del gefitinib como segunda o tercera línea (es decir, luego que el paciente hubiese sido expuesto a quimioterapia), contrastado con la ausencia de beneficio cuando el gefitinib era utilizado en combinación con quimioterapia en la primera línea. Nunca hubo un consenso al respecto. Se postuló, entre otras hipótesis, que serían necesarias determinadas mutaciones en el gen de EGFR para poder obtener beneficio con gefitinib. Posteriormente, un ensayo de fase III publicado en el año 2008 mostró "no-inferioridad" del gefinitib en comparación con quimioterapia estándar con docetaxel, como segunda línea de tratamiento, en pacientes previamente tratados con quimioterapia basada en derivados de platino (Kim et al, Lancet 2008;372:1809-1818). Los pacientes con un alto número de copias del gen EGFR no mostraron mayor beneficio con gefitinib. Este ensayo planteó la alternativa: ¿"quimioterapia o pastilla"?, pero no es conveniente apresurarse a aceptar que nos marquen el espacio de ese modo. La "pastilla" causa diarrea y rash cutáneo importante.

El erlotinib tuvo sus quince minutos de fama al demostrar una discreta (y estadísticamente significativa) mejora en la supervivencia respecto de placebo, en la terapia de segunda línea en cáncer de pulmón en su variante más común (el conglomerado de histologías que denominamos "a células no pequeñas") (Shepherd et al. N Engl J Med 2005;353:123-132). ¿No podría comentarse, acaso, que el erlotinib sería poco más que "un corticoide caro"? Razonemos: ¿varios miles de dólares al mes, en tratamiento de duración indefinida, para incrementar la supervivencia en un mes y medio? La tasa de respuesta objetiva fue de un dígito -nada más. Los efectos adversos comunes incluyen erupción cutánea acneiforme, a veces severa, trastornos gastrointestinales y alteraciones en el laboratorio clínico. Diversos grupos demostraron que el beneficio clínico se restringe a los pacientes cuyo tumor exhibe determinadas mutaciones del gen del EGFR (Pao et al. Proc Natl Acad Sci U S A 2004;101:13306-13311), pero ... no hay test comercialmente disponible, y no parece que vaya a haberlo en el futuro próximo. Pensando con desconfianza, tal test reduciría el universo de pacientes consumidores del fármaco, que genera una facturación mundial de varios miles de millones de dólares anuales.
Por otra parte, los oncólogos tenemos algunos indicios clínicos (torpes e incompletos) que permitirían guiar preliminarmente la asignación de esta terapia: mujeres, no fumadoras (idealmente, nunca fumadoras) con adenocarcinoma - no con carcinoma epidermoide - tendrían mejor probabilidad de beneficio con erlotinib.

Hasta el momento, el uso de gefitinib o erlotinib como terapia inicial ("primera línea") en cáncer de pulmón no ha sido aprobado por agencias regulatorias europeas o americanas, pero ha habido ensayos de fase II, en particular en pacientes añosos o malos candidatos para quimioterapia, y en pacientes con la histología broncoalveolar (o "bronquíolo-alveolar"), variante del adenocarcinoma. En este subgrupo (broncoalveolar) se publicó una tasa de respuesta de 18% con erlotinib, pero el ensayo fue de naturaleza no controlada (tratamiento único), lo que impide ponderar la eficacia.

En esta semana, un ensayo de fase III realizado en Asia mostró superioridad del gefitinib frente a quimioterapia estándar con dos drogas (carboplatino y paclitaxel) en primera línea en adenocarcinoma pulmonar avanzado. El estudio fue publicado en forma completa, en su versión electrónica solamente (Mok et al, N Engl J Med 2009, agosto 19; www.nejm.org). Hay dos detalles a señalar: a diferencia de la estrategia elegida para erlotinib, en el ensayo asiático con gefitinib, se examinó una muestra de tumor para establecer si exhibía mutaciones del gen de EGFR que maximizaran la probabilidad de respuesta al fármaco, y por otra parte, el endpoint del estudio fue la tasa de supervivencia libre de progresión a 12 meses de iniciado el tratamiento. Así fijadas las reglas, el gefitinib se asoció con 24.9% de supervivencia libre de progresión a 12 meses, versus sólo 6.7% con paclitaxel / carboplatino - en el grupo total - pero... en el subgrupo con mutación del gen EGFR, gefitinib fue superior, en tanto que en el grupo con gen de EGFR no mutado, carboplatino + paclitaxel fue la terapia superior.

Digamos claramente que estos resultados son demasiado peculiares, y que cuesta tomarlos a valor nominal. Buscando explicaciones, puede uno plantearse:
¿Serán diferentes pacientes? La preselección en función del test de mutación del EGFR podría haber generado "un tipo diferente de adenocarcinoma".
¿Habrá diferencias farmacogenómicas importantes en los pacientes asiáticos? ¿Qué explicaría la pobre performance de paclitaxel/ carboplatino? Recordemos que en ensayos de fase III, los resultados con paclitaxel /carboplatino han sido muy superiores - pero se trata de ensayos en Norteamérica y en Europa.
Lo único que parece factible y creíble es que si no está presente la mutación del EGFR que confiere sensibilidad a gefitinib (y la quimioterapia es superior), en tanto que lo opuesto es cierto ante determinadas mutaciones del gen de EGFR. Hay que tener el test genético-molecular para decidir. Esto se ve fortalecido por el reciente artículo de Rosell et al, del grupo del Instituto Catalán de Oncología en más de 2100 pacientes con cáncer de pulmón avanzado (http://content.nejm.org/cgi/content/full/NEJMoa0904554).

Son demasiadas dudas, para una mañana de sábado. No estamos listos para considerar el uso rutinario de estos fármacos en la primera línea de tratamiento del cáncer de pulmón. Y en la segunda línea... aún carecemos de herramientas adecuadas para identificar qué pacientes serían los mejores candidatos a "beneficiarse". Más allá de preferencias, nivel de evidencia clínica y costos (para nada despreciables), tenemos limitaciones para asignar racional y prudentemente la mejor opción a cada paciente. Tener disponibles los tests genético-moleculares que permitieran identificar la presencia o ausencia de mutaciones clave en el gen del EGFR sería un buen primer paso. Los resultados deberían estar disponibles en tiempo razonable (una semana). En realidad, hay talento profesional y capacidad instalada suficientes en la Argentina como para poner a disposición estos tests.

Entendámonos: "no hay enfermedades, sino enfermos" y "cada paciente es un mundo", de modo que podría haber circunstancias extenuantes para decidir el uso de alguno de estos productos, pero de ninguna manera como conducta rutinaria.

Cordialmente,
Dr. Pedro Politi

domingo, 19 de julio de 2009

Un poco de historia

 

Hoy en día sabemos que los ensayos controlados, randomizados, son el mejor método que tenemos los profesionales dedicados a la oncología para enfrentar los problemas, las preguntas, y la incertidumbre que nos plantea esta enfermedad.

¿Pero desde cuándo contamos con esta herramienta?

El primer estudio clínico randomizado se llevó a cabo entre los años 1946 y 1948, en el contexto de una creciente preocupación por una enfermedad que no contaba con un tratamiento probado y que, luego de un curso extremadamente variable, con frecuencia llevaba al paciente a la muerte: La tuberculosis.

Durante más de cien años se habían realizado experimentos sin ningún control, intentando encontrar la cura para esta patología, pero los resultados habían sido tan fallidos como difíciles de interpretar.

Ahora había surgido una nueva droga, la estreptomicina, aunque solo se hallaba disponible en cantidad limitada, y se ignoraba su grado de eficacia. Pocos imaginaban que su puesta a prueba determinaría el comienzo de una nueva etapa en la historia de la medicina.

Sir Austin Bradford Hill, especialista en epidemiología y estadística, y el Dr. Philip D´Arcy Hart, experto en TBC, fueron impulsores y protagonistas de este primer estudio randomizado. Sus argumentos para ponerlo en marcha fueron, por un lado, la escasez de estreptomicina y por otro, el hecho de que el curso de la enfermedad era tan impredecible, que la mejoría de un paciente con determinado tratamiento no podía considerarse prueba de su utilidad.

Este primer ensayo clínico demostró en dos años que el tratamiento con estreptomicina más reposo era superior al reposo. Un avance importantísimo. No solo en la búsqueda de una cura para esta enfermedad, sino, y más importante aún, en la medicina como ciencia, inagurando una nueva era en la investigación clínica.

Un muy interesante y ameno relato sobre los comienzos de la investigación clínica puede leerse en el libro “Clinical Trials in Oncology”, de S. Green, J. Benedetti y J. Crowley.

jueves, 16 de julio de 2009

Decisiones de la FDA: trabectedina; fentanilo gel oral

Dos interesantes novedades provenientes de la FDA:

Por una parte, el Comité Asesor sobre Drogas Oncológicas (ODAC, por su sigla en inglés) decidió abrumadoramente (14 a 1) rechazar la solicitud de aprobación de la combinación de trabectedina (antitumoral de origen marino, aprobado en Europa para sarcomas de tejidos blandos recaídos o refractarios) más doxorrubicina liposomal pegilada (Caelyx en Europa y Argentina; Doxil en USA) en primera línea en cáncer epitelial ovárico. El rechazo se fundamentó en dudas sobre la calidad de la evaluación de respuesta por imágenes, entre otros puntos.
La FDA no está obligada a seguir las recomendaciones de ODAC o de cualquier otro comité de expertos que convoque, pero habitualmente lo hace.

En contraste, la FDA anunció hoy la aprobación de una nueva formulación de fentanilo: gel adhesivo para la mucosa oral. Este producto (con el nombre comercial Onsolis, desarrollado inicialmente por una pequeña empresa, BioDelivery Science International) llevará una fuerte advertencia ("black box warning") en su prospecto, señalando que sólo es adecuado para el tratamiento del dolor emergente ("breakthrough pain") en pacientes con cáncer avanzado, ya en tratamiento crónico con narcóticos. La advertencia indicará que este fármaco no está indicado para dolores comunes, cefaleas, ni para pacientes que no hayan desarrollado cierta tolerancia a narcóticos, ya que podría causar depresión del sensorio y depresión respiratoria, potencialmente serias, en individuos nunca tratados con opioides. Adicionalmente, la distribución y uso de este fármaco se verá restringida y monitoreada por la FDA.
La idea básica de esta formulación de fentanilo es proveer un efecto analgésico intenso, en corto tiempo (pocos minutos), de modo de controlar el dolor emergente severo.

Otra formulación de fentanilo disponible en los EEUU es el "chupetín" (lollypop) o "lozenge oral" (material esponjoso embebido con el narcótico, desleíble en la cavidad oral, sostenido por un segmento de plástico rígido: un chupetín), aprobado para la misma indicación.

Atentamente,
Dr. Pedro M. Politi


miércoles, 15 de julio de 2009

Sobre el uso del PET en la estadificación del cáncer de pulmón

Vale la pena utilizar el PET para la estadificación del NSCLC (cáncer de pulmón no a células pequeñas) ?

El primer punto a aclarar sería si éste realmente mejora la detección de adenopatías y/o metástasis con respecto a la TC. De acuerdo a un estudio prospectivo publicado por el NEJM en 2003 (Lardinois et al; “Staging of Non-Small-Cell Lung Cancer with Integrated Positron-Emission Tomography and Computed Tomography”), que compara la precisión en el diagnóstico y estadificación de NSCLC de TC, PET, PET+TC correlacionados visualmente, PET+TC integrados, “Tumor staging was significantly more accurate with integrated PET-CT than with CT alone (P=0.001), PET alone (P<0.001), or visual correlation of PET and CT (P=0.013).” Y agrega: “In metastasis staging, integrated PET-CT increased the diagnostic certainty in two out of eight patients”. Numerosos ensayos han corroborado estos datos.

Una vez establecido que el PET mejora el diagnóstico y la estadificación del NSCLC, cabe preguntarse qué beneficios derivan de esta mayor precisión diagnóstica.

En el año 2008, en el Int. J. Radiation Oncology Biol. Phys., se publicó un artículo (Mac Manus et al., “The use of PET in the staging/evaluation, treatment, and follow-up of patients with lung cancer: A Critical Review”), donde puede leerse: “FDG-PET can help prevent unnecesary surgery by detecting intrathoracic LN metastasis or distant metastasis”, y agrega: “Poor patient selection and inappropiate target volume determination, both of which are consequences of inadequate tumor staging, have undoubtedly contributed to the historically dismal results of radical RT in NSCLC. We now know that about one third of patients treated with radical RT in the pre-PET era had disease that would be considered incurable at the outset with our current treatment protocols”.

Entonces, el PET modifica conductas terapéuticas. Evita cirugías innecesarias en pacientes que presentan metástasis ganglionares o a distancia no detectadas por TC, por ejemplo, o ayuda a seleccionar mejor los pacientes candidatos a RT radical.

Y, finalmente, cabe pensar que, si pacientes que por TC son M0 y por PET son M1 (“stage migration”), utilizando el PET se lograría mejorar los resultados terapéuticos de ambas categorías, ya que comenzarían a incluírse en M1 pacientes con metástasis de bajo volumen tumoral, y quedarían excluídos de M0 aquellos pacientes con metástasis no detectadas por TC.

Podríamos concluir que las ganacias obtenidas al utilizar el PET en la estadificación del cáncer de pulmón superan ampliamente a los costos, y éste debería, en la medida de lo posible de acuerdo al contexto, formar parte de los procedimientos standard a realizar a la hora de evaluar a un paciente portador de NSCLC.

Dra. Ana Cagnoni

domingo, 12 de julio de 2009

Profilaxis antiemética adecuada: un derecho básico

En 1995, el PAMI brindaba gratuitamente los medicamentos citotóxicos (quimioterapia) a un afiliado que tuviese la indicación del especialista en Oncología, pero... sólo cubría parcialmente la medicación antiemética. Este desfasaje, señal indudable de un deterioro en las prioridades de calidad asistencial y en el nivel de la gestión profesional, fue solucionado. Adicionalmente, en 1996 entró en efecto el Programa Médico Obligatorio, que ( lamentablemente) sólo mencionaba al ondansetrón como fármaco antiemético a ser cubierto al 100%.

Actualmente, la "letra chica" del PMO no ha variado en lo relativo a la profilaxis y tratamiento antiemético asociado a la quimioterapia antitumoral, lo que pone al descubierto el grado de desinterés en el tema, por parte de la gestión actual y de las previas - por los últimos 13 años.

El problema se complica por la proliferación de esquemas de quimioterapia particularmente intensos, con mayor tendencia al manejo ambulatorio de los pacientes, y el consiguiente desplazamiento de los costos (la medicación en internación debe ser provista sin cargo al paciente; la medicación "no-oncológica" tiene solamente un descuento del 40% para el uso ambulatorio). Por otra parte, el progreso en la profilaxis de la emesis aguda y tardía se ha plasmado en sistemáticas nuevas, recomendadas por la American Society of Clinical Oncology (Kris MG et al. J Clin Oncol 2006; 24: 2932) y otras refrendadas por la European Society of Medical Oncology (Herrstedt J et al. Annals Oncol 2007; 18 (2): iii83; link: http://annonc.oxfordjournals.org/cgi/reprint/18/suppl_2/ii83).

Actualmente no hay excusa para el oncólogo clínico: no indicar (y monitorear) la profilaxis antiemética adecuada, según alguna de las normativas existentes, representa una falla ética seria, una falta de compromiso con la calidad de vida de los pacientes - y de sus familias.

La selección comienza por estimar el riesgo de emesis asociado a cada esquema de quimioterapia, y continúa con la indicación de un esquema de profilaxis de emesis aguda y tardía adecuado al potencial emetizante previamente identificado.

Dexametasona, ondansetron y aprepitant son tres medicamentos básicos para la profilaxis antiemética cuando se emplean esquemas de quimioterapia de riesgo moderado-alto o elevado. Situaciones de menor riesgo podrán manejarse con dexametasona + ondansetrón; otras de riesgo bajo, quizás con dexametasona solamente o aún sin profilaxis (en decisión individualizada, según el tratamiento propuesto y la situación clínica del paciente).

Es cierto que en nuestro país (proclamado "federal" pero tan centralista en sus decisiones ejecutivas y en su distribución de recursos y poder) las oportunidades y el acceso a una atención médica (y a una cobertura en medicamentos, métodos diagnósticos y terapias) son muy dispares e injustas. Pero no habiendo esos recursos, quedará claro qué reclamar, y habiéndolos... no hay excusa.

¿Qué estamos esperando?

Cordialmente,
Dr. Pedro M. Politi

sábado, 11 de julio de 2009

Melanoma: un mes que vale por un año

La terapia adyuvante (post-operatoria) estándar de pacientes con melanoma localizado fue definida hace unos cuantos años, con el ensayo clínico aleatorizado E1684, en que altas dosis de interferón alfa intravenoso por 4 semanas, seguido de dosis bajas por vía subcutánea por un año mejoraron la sobrevida libre de recaída respecto de observación. Sin embargo, otros ensayos clínicos con interferón subcutáneo habían resultado negativos, por lo que correspondía preguntarse si la ventaja obtenida en el ensayo E1684 podría deberse solamente a la etapa de altas dosis intravenosas por un mes.

A fin de responder esta pregunta, un grupo de investigadores griegos condujo un interesante ensayo clínico, recientemente publicado en forma completa: http://jco.ascopubs.org/cgi/content/abstract/27/6/939 Pectasides D, et al. J Clin Oncol 2009; 27: 939-944.

El ensayo incorporó pacientes con melanoma en estadíos IIB, IIC y III, dentro de los 56 días post-cirugía con intención curativa. Los pacientes fueron asignados al azar a recibir interferón intravenoso (IFN-{alpha}-2b 15 x 106 U/m2 IV x 5/7 días semanales x 4 semanas; rama A) versus el mismo esquema, seguido de FN-{alpha}-2b 10 x 106 U (dosis "plana", igual para todos los pacientes) por vía s.c. tres veces semanales, por 48 semanas (rama B). Resultados: El reclutamiento de 364 pacientes tomó entre 1998 y 2004. De ellos, 353 fueron elegibles (rama A, n = 177; rama B, n = 176). Las características pronósticas y demográficas estuvieron bien balanceadas entre las ramas: 48 y 43% con espesor Breslow > 4 mm, 60 y 61% con ulceración tumoral, 59 y 60% con compromiso ganglionar regional. Luego de un seguimiento mediano de 63 meses, la supervivencia libre de recaída fue de 24.1 meses versus 27.9 meses (P = .9) y la supervivencia global, 64.4 versus 65.3 meses, respectivamente (P = .49). Los pacientes en la rama B tuvieron más hepatotoxicidad, náusea, emesis, alopecia y neurotoxicidad, generalmente, grados 1 y 2. Recordemos que ambas ramas tuvieron cuatro semanas de tratamiento intravenoso e intenso, y que esto se asoció con toxicidades serias (grados 3-4): neutropenia (8-15%), hepatotoxicidad (6%), náusea/vómito (1%), cuadro pseudogripal (10-11%), trastornos neurológicos y psiquiátricos (incluyendo depresión y delirio) en 6%. Hubo una muerte tóxica (distress respiratorio) en la rama B.

En conclusión: "más no es mejor". Un esquema de terapia adyuvante intravenosa intensa con interferón alfa 2 beta por 4 semanas brinda resultados a largo plazo similares al esquema de 4 semanas por vía intravenosa más completar un año con interferón por vía subcutánea. Paralelamente, se reducen la toxicidad, molestias y costos. Sin duda, una buena noticia. Y un excelente ensayo clínico.

Cordialmente,
Pedro Politi